El centro de las ciudades, fue, es y será siempre un punto de gran atractivo y demanda constante para negocios y empresas importantes, que quieran dar imagen, y estar bien posicionados.
Con el paso de los años, en el centro de Gijón se han conformado dentro del sector servicios, principalmente zonas de tiendas y zonas de hostelería, además de registrarse la actividad financiera y de despachos profesionales. Los puntos de peso comercial de negocios de hostelería algunos se mantienen y otros se van trasladando por épocas. Así, las calles del “Barrio del Carmen” entre la Plaza del Carmen y la calle Marqués de San Esteban, que hace 20 años estaban “abandonadas”, conforman ahora una zona deseada para vinaterías, restaurantes y bares de copas.
Es importante para alguien que esté buscando ubicación para su empresa hacer un estudio del tipo de actividad que se desarrolla en la zona para favorecer el éxito.
En muchas ocasiones, a una tienda de ropa le conviene ponerse en la zona de tiendas para tener más probabilidades naturales de que entren posibles compradores. ¿Por qué? Cuando vamos “de tiendas” nos gusta ver distintas opciones. Así, al estar en la zona de tiendas será más visto el producto y habrá más opciones de compra. En otros casos se busca lo contrario, zonas donde no haya ningún punto de venta de la misma actividad: por ejemplo, para una peluquería sería preferible que no hubiera más en un radio al menos pequeño… o sí, si el servicio es muy superior al de la competencia. Normalmente las mujeres probamos en varios sitios, y elegimos la que más nos gusta. Pero no nos peinamos dos veces, en cambio sí podemos comprarnos dos prendas en diferentes tiendas.
Por otro lado, es llamativo y curioso que en una misma calle e incluso dentro del mismo tramo dependiendo de la acera donde esté el local haya un tramo mucho más comercial que otro, entendiendo como comercial, zona de comercio, es decir de flujo de dinero, de negocios, de consumo. Existen microzonas más o menos comerciales dentro de una misma calle. ¿Esto por qué sucede?
¿Cuáles son los factores que influyen para que entre dos calles contiguas una sea comercial y otra esté casi “vacía”?
Los principales motivos son tres:
– Negocio atrae negocio: la existencia de negocios importantes o centros de actividad (públicos o privados), o elementos urbanos que favorezcan el flujo de gente: un simple paso de peatones, una parada de autobús, un kiosco o un estanco… Siempre hubo negocios o actividades que atraen al público y consecuentemente los negocios de al lado salen beneficiados, pensemos en un consultorio médico o ambulatorio, farmacias, oficinas de correos, entidades bancarias, centros comerciales o grandes almacenes…
– Zonas de paso de gente intermedias entre dos puntos de interés para los ciudadanos. Por ejemplo, allí donde llegan los autobuses urbanos, paradas de taxi, estación de tren… la gente toma una dirección o varias hasta llegar a su destino.
– El plan estratégico de los propios negocios. Este punto es imprescindible independiente de la zona.
Concretamente existen algunas zonas que han sufrido este fenómeno de desertización en el centro de Gijón “desiertos en el oasis”: Alvarez Garaya (entre la iglesia San José y Cajastur, y entre el cruce con Langreo y Donato Argüelles), Donato Argüelles (entre Alvarez Garaya y Asturias) y Libertad (entre plaza del Carmen y Langreo). En los últimos años han ido cerrando locales y ahora se encuentran algunos funcionando y con éxito “oasis en el desierto”, como Eterbell en la calle Donato Argüelles, y Fausto en la calle Libertad, pero podríamos decir que son casi como “oasis en el desierto”. Todos los gijoneses del centro saben que hace años este tramo tenía un aspecto muy diferente. Recuerdo cuando iba a Simago a comprar con mi madre, que ocupaba la gran superficie en la manzana de Donato Argüelles y Libertad, y el quiosco en Alvarez Garaya, donde íbamos a comprar chuches después de llegar del colegio en autobús.
Este es un claro ejemplo de que en algunos casos hay cierto tipo de negocios e instalaciones que favorecen el flujo de gente, y hacen que la zona se revalorice y atraen el alquiler de otros negocios; y a la inversa, la desaparición de algunos negocios hacen más difícil el flujo de gente, y la visibilidad “natural” se reduce. Estoy segura de que si el local de Simago se alquilara de nuevo con éxito el aspecto de estas calles volvería a cambiar…
Esto genera migraciones, a veces tan solo a dos manzanas más allá, y esto lo sabemos bien en Agencia Asturias, donde hemos alquilado en la calle Asturias a Cheché el fotógrafo, que se trasladó precisamente de la calle Donato Argüelles, la tienda de complementos Lo&Be de la calle Langreo a la calle Asturias…
De todas formas, no sólo en el centro existe actividad comercial. En Gijón hay zonas o barrios de mucha importancia como el Llano, la Arena y la Calzada, donde poner un negocio puede ser todo un éxito, claro está dependiendo si el cliente al que va dirigido el producto o servicio “target group“, se encuentra en estas zonas. Al igual que en el centro sucede exactamente lo mismo: negocio atrae negocio…
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